La recientemente nombrada secretaria de Desarrollo Social y Humano de Guanajuato (Sedeshu), Libia Dennise García Muñoz Ledo, llegó a su despacho y lo primero que hizo fue trazar la ruta de un nuevo maratón. En cosa de un mes va a recorrer los 46 municipios del estado de Guanajuato. Esa es la única manera de que ella constate de primera mano los avances del gobierno de su jefe, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo y donde haya rezagos, haga falta apretar tuercas, echarle más ganas y canalizar más recursos, pues ella con sus propios ojos evaluará la realidad.
Esa es una excelente noticia porque guanajuatenses somos todos y en el camino andamos. Y la gente que padece pobreza, violencia o rezago no tiene partido ni color. La entidad no es solamente el corredor industrial. Es también las zonas rurales que no tienen acceso a la agroindustria de primer nivel y algunas zonas urbanas que requieren la escucha atenta que seguramente la secretaria les va a ofrecer. Es una oportunidad imperdible para Libia Dennise para que no le digan, para que no le cuenten.
GUANAJUATENSES APLICADOS
El Presidente Andrés Manuel López Obrador suele expresarse de manera negativa de Guanajuato en sus alocuciones mañaneras. Sin embargo, de manera institucional, están destacando diversos actores públicos de Guanajuato a nivel nacional.
Es el caso del Fiscal General de Justicia de Guanajuato, Carlos Zamarripa, quien ha recibido distinciones del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) –cuando todavía tenía quórum; del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) –a cargo de Graciela Márquez Colín, entre otras instituciones, por la eficacia de su gestión y la transparencia de su trabajo.
Así sucedió con el Secretario de Seguridad Pública, Alvar Cabeza de Vaca cuando en octubre del año pasado el propio INEGI reconoció que Guanajuato es el estado que más armas decomisa. Y esta semana, el propio Instituto (esas encuestas sí son objetivas), reconoció que tanto en León como en Irapuato la percepción de inseguridad disminuyó.
Lo mismo pero aumentado ocurrió ayer, en la séptima reunión nacional plenaria del Consejo Nacional de Autoridades Educativas en Cancún, Quintana Roo. Ahí, la Secretaria de Educación Pública Federal (SEP), Leticia Ramírez Amaya, se deshizo en elogios, así como lo oye, por el trabajo que se realiza de manera institucional y colaborativa con el estado de Guanajuato. Resulta que en Guanajuato 38 mil 162 estudiantes han regresado a las aulas.
El secretario de Educación de Guanajuato encuentra alumnos desertores y los regresa a las aulas, como el de Seguridad encuentra migrantes secuestrados en otros estados y los libera.
Y si a eso le sumamos que Marisa Ortiz, Secretaria de Medio Ambiente, encabeza a los secretarios de medio ambiente de todo el país y Juan Hernández, a las oficinas estatales de migración, pues queda claro que el gobierno de Diego SInhue da para dar y prestar.
¡Y EN ESTA ESQUINA…!
Ya va a empezar el jaloneo de la lucha libre entre los precandidatos de todos los partidos, Es el tiempo de la picada de ojos, de las machincuepas, las urracarranas y las patadas por debajo de la mesa.
Tal vez por eso, nuevamente Morena dio show en el Congreso en la Sesión del Pleno, en donde al presentar la propuesta para realizar una auditoría específica a los programas sociales de la Sedeshu (qué coincidencia), convocó a algunos “agitadores” para gritonear, aplaudir y llevar letreros provocadores para acompañar a la diputada Hades Aguilar.
El diputado Víctor Zanella le entró a la maroma y asestó que Morena no “ve la viga en el ojo ajeno”, pues solo quiere poner zoom al estado de Guanajuato, y no señala “cómo la Federación ha impactado en los precios de la canasta básica”.
Y, hablando del INEGI, estaría bueno que se aventara una encuesta para ver cuánto dinero del que destina la Federación a los jóvenes –supuestamente para desarrollo social– termina en el Oxxo o en el consumo de sustancias que nos tienen como nos tienen a nivel nacional e internacional.