El Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), uno de los proyectos emblemáticos de la Cuarta Transformación, no solo traerá desarrollo y competitividad al sureste del país, también conflictos sociales y delictivos, según advirtió una presentación del Ejército filtrada en los Guacamaya Leaks.
En el documento que data de febrero de 2021, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) prevé que el desarrollo tanto del ferrocarril como de los parques industriales en la zona provoque disputas por el suelo y entre bandas criminales.
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“Con el proyecto en marcha del corredor Transístmico de Tehuantepec Salina Cruz, Oaxaca – Coatzacoalcos, Veracruz de la actual administración federal, en donde existirá una importante derrama económica, se prevén nuevos conflictos territoriales, sociales y de la delincuencia organizada por aprovechar las oportunidades económicas que dicho proyecto generará”, dice la presentación.
El CIIT es un proyecto que conectará el Golfo de México y el Océano Pacífico para facilitar el comercio en el país y desde Asia a la costa Este de Estados Unidos, con el fin de competir con el Canal de Panamá.
Para ello, el gobierno prevé rehabilitar 309 kilómetros de vía ferroviaria con una inversión de tres mil 900 millones de pesos, lo que permitirá la reducción de tiempos de traslado de 7.5 horas a cuatro horas, así como una inversión de superior a los dos mil millones de pesos para modernizar los puertos de Salina Cruz y Coatzacoalcos, entre otras.
Además, se otorgarán beneficios para la construcción de 10 parques industriales por diversas industrias, para beneficiar directamente a 79 municipios de Veracruz y Oaxaca así como a toda la región.
Pero la Sedena advirtió que estos beneficios pueden originar el incremento de la violencia e inseguridad en los municipios de Jesús Carranza, Sayula de Alemán, Acayucan, Jáltipan de Morelos, Cosolecaque, Minatitlán y Coatzacoalcos, en el estado de Veracruz; y en Salina Cruz, Tehuantepec, Asunción Ixtaltepec, Juchitán, Ixtepex, Barrio la Soledad, Matías Romero y San Juan Huichicovi, en Oaxaca.
La dependencia federal detectó la presencia de cinco organizaciones delictivas que sostienen confrontaciones entre ellas para desarrollar sus actividades ilícitas, lo que puede derivar que en los municipios que integran el CIIT incrementen sus niveles de violencia en el mediano plazo.
Entre estos grupos delictivos están el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), los Zetas y el grupo de los Beltrán Leyva.
De acuerdo con la Sedena, la región sureste es la que menor índice delictivo, pero hay estados donde el índice de criminalidad está por encima de la tasa nacional: Veracruz, Tabasco y Quintana Roo.
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En el caso de Oaxaca, la dependencia destacó sus bajos índices de inseguridad, pero no descartó un incremento en la violencia a causa de la explotación de las fuentes de ingresos económicos que el Corredor Transístmico pueda generar.
En cuanto a Veracruz, advirtió incrementos en los homicidios y extorsiones, presumiblemente por disputas por el control del territorio que ocupará el proyecto.